Habiendo conversado largamente con Tony y sabiendo que el hombre está ansioso por explorar a Lucy, Kasper todavía no está seguro de cómo reaccionará Lucy a su propuesta.

Durante un reciente viaje a Egipto, Kasper se entera de una piedra turquesa que se rumorea puede disminuir las inhibiciones. Es el regalo perfecto para Lucy, una forma de presentarle la idea de una asociación completa con él y Tony.

Él no le dice sobre el hechizo, pero después de que él le regala la piedra de la manera más provocativa, el deseo sexual la asedia a cada paso, abriéndola a ideas que previamente no había considerado.

Con un poco de encanto y persuasión de Tony y Kasper, y con una charla de corazón a corazón con su hermano, Lucy se da cuenta de que el amor y el ardiente sexo al que está acostumbrada es lo que ella desea más que nada y quiere compartirlo todo con ambos hombres.